lunes, 14 de noviembre de 2005

Dualidad (Imaginación)

La dualidad es un fenómeno que capto en mi manera de ser humano. En particular, al observar mi imaginación puedo ver que la creación de imágenes, apartado del cotidiano vivir, ver y sentir que utiliza esta potencialidad interior para vivenciar el momento presente, es una continua actividad interior que genera distintos escenarios, escenas e imágenes individuales.
Entre los escenarios, escenas e imágenes individuales "automáticamente" generados, pueden figurar algunas que evoquen eventos desagradables, dolorosos o dañinos para mi bienestar físico, y pueden evocar eventos agradables, alegres e incluso divertidos, que pueden dibujar una sonrisa en mi experiencia del momento.
Algo que me es evidente es que, en mi caso (y creo que en las restantes personas puede ser diferente), predominan aquellos escenarios que presentan posibles situaciones que atentan contra mi bienestar. Y no está en mi voluntad consciente el generar tales imágenes, sino que surgen por una especie de "experiencia interna" que proyecta posibles consecuencias de mi presente situación de vida. En todo caso, es como la expectativa de ocurrencia de eventos negativos (negativos porque se refieren a situaciones que no son de mi agrado y se oponen a mi bienestar y estabilidad en general). Como por ejemplo, al pasar junto al escenario de un accidente pudiera generarse una imágen mía en la situación que se muestra a mis ojos.
Me doy cuenta de que, en la medida en la que, voluntariamente dirijo mi imaginación hacia situaciones y eventos agradables, mi estado de ánimo puede acompañar estas imágenes en una forma de causa-efecto que no tiene nada que ver con la vivencia del presente, pero que me puede favorecer para crear un "ambiente interior" que me permita afrontar cualquier situación en forma de obtener el mayor provecho y visualizar las mejores alternativas de acción en el caso de que dicha situación no sea, momentáneamente, de mi agrado. Por el contrario, si dejo que las imágenes negativas se generen espontáneamente, puedo conducirme a mí mismo a estados de ánimo que me bloqueen en el mejor aprovechamiento de las experiencias, incluso de situaciones que sean favorables.
La dualidad negativo-positivo, negación-afirmación, bienestar-malestar es consecuencia de imágenes evocadoras de eventos de mi historia personal, o de cuanto me rodea, sin control consciente de mi parte. Las situaciones, eventos e imágenes que mi imaginación presenta interiormente tienen el matiz y el tinte de las experiencias que forman parte de mi historia humana personal "en automático". En el presente, en el que tomo conciencia de dichas impresiones, puedo dirigir mi imaginación hacia la creación de un mejor devenir, incluso en aquellas circunstancias en las que mi bienestar físico esté en juego. Y de lo que estoy seguro actualmente es que yo creo o he creado, promuevo o he promovido, permito o he permitido todo cuanto acontece en mi vida, consciente o inconscientemente.
La claridad no es precisamente lo que puedo observar en esta manifestación. Simplemente sigo buscando caminos de iluminación de mi acontecer personal, para compartir lo que pienso y siento.